Santuario Arquidiocesano Señor de la Divina Misericordia 2020 Beatriz Sologuren en la presentación de la revista

Beatriz Sologuren en la presentación de la revista

Buenas noches padre Carlos, padre Moisés y hermanos en general que están participando de esta importante ceremonia; ceremonia que debió haber sido como realmente se programó, pero desafortunadamente se nos vino una pandemia que nunca imaginamos vivir. Yo siempre digo: por algo suceden las cosas, esto quedará gravado, en la historia de nuestro Santuario.

Quiero, ante todo agradecer a nuestros queridos padres Carlos y Moisés por la invitación, la verdad es que me siento muy honrada y adecuando la frase del padre Carlos “gracias por invitar a esta humilde e inútil servidora”

Primero que nada, quiero resaltar el excelente trabajo que han hecho los responsables de esta edición y lo digo con conocimiento de causa porque con el padre José editábamos mensualmente la Revista “Peregrino” y si, que nos costaba el contenido, diseño, material, revisión, fotografías, etc, etc. Veo con gusto que el resultado es de alta calidad y se ha logrado plasmar parte de nuestras experiencias vividas durante 25 años, los logros con su continuidad y lo que actualmente se viene haciendo.

En cuanto al comentario que me pidió el padre Moisés respecto a mi aporte en la revista, les voy a mencionar algunas cosillas que se me han venido a la mente:

Tuvimos muchos problemas con los vecinos del primer terreno que se nos dio en sesión en uso por la Municipalidad de Surco, se opusieron a la construcción de una parroquia en “su parque” y lo digo entre comillas porque ellos lo convirtieron en parque. Sacaban artículos en los periódicos acusando a la Iglesia Católica de ir contra el medio ambiente. Fue una lucha de dos o tres años más o menos.

A nuestra querida arquitecta Alicia Coloma, el padre José le cambiaba a cada rato el proyecto y mientras ella corregía los planos, él corría con la construcción, ufff fue muy bravo, pero Alicita era incapaz de reclamar ni decirle nada, para ella lo que decía el padre José era santa palabra, siempre fue la amabilidad y humildad personificada. La verdad es que yo la admiraba muchísimo y siempre estuvimos juntas, muchas personas creían que éramos hermanas de verdad.

Lo que también me gustaría contarles es que ayer comprobé con la misa celebrada en el Monasterio de la Virgen del Carmen, lo importante que fue hacer una evaluación técnica de acústica para el Templo; me acuerdo que acudí a mi profesor de la universidad Arq. Henry Biber vecino nuestro, quien enseñaba Iluminación y Acústica dentro del curso de Teoría de la Arquitectura; le pedí que nos hiciera el cálculo de la altura de las paredes y techos y ver los materiales para que haya una buena acústica en el Templo, lo hizo gustoso sin cobrarnos ni medio; me acuerdo que nos bajó la altura del techo como en 5.00 metros, al padre José casi le dio ataque, pero cuando se dio cuenta lo importante que era, lo hizo, no lo bajó 5 metros sino 3, pero se obtuvo un buen resultado, la acústica de nuestro templo es excelente.

Bueno finalmente, quiero felicitar al padre Carlos y al padre Moisés por la gran labor pastoral que vienen haciendo en nuestro santuario, me he enterado por la revista que existen 28 grupos formados y que trabajan con mucho cariño. Con alegría veo que hay mucha juventud, lo cual es muy bueno. Yo que me alejé por casi dos años de nuestro santuario por temas muy personales, he regresado a raíz de las reflexiones y conferencias que veía por internet antes de la cuarentena, tan claras, didácticas y valiosas para nuestro crecimiento espiritual; y bueno nada más que, agradecerles nuevamente por estos momentos que me han permitido expresar mi sentir.

Muchas gracias

Related Posts